¡YA HA LLEGADO LA PRIMAVERA!

¡Después del fin de semana, hoy hemos llegado al cole, y resulta que la Primavera también ha venido hoy a clase!

Ya llevábamos varios días esperando que llegara. Habíamos ido observando en los árboles del patio algunos cambios, también comenzaban a aparecer insectos en las plantas del recreo, e incluso algunos días ya había hecho calor. Para reconocer el cambio de las estaciones, después de observar nuestro entorno y de conversar sobre lo que cada uno sabía del invierno y la primavera, hicimos un juego. Repartimos entre todos los niños y niñas, las tarjetas y fotos que utilizamos para aprender vocabulario, construir frases y jugar a las adivinanzas.

Cada uno tenía que decir qué imagen había en su foto y si correspondía al Invierno o a la Primavera.

Aprendimos el nombre de muchas flores y de muchos insectos que con la llegada de la Primavera salían en los parques y en el campo. 

Y entonces, la seño nos contó el cuento de "La semilla dormilona".

Durante el invierno la semilla está bajo tierra en "su casita" durmiendo muy calentita. Aunque llega el sol, y llama a su puerta para darle luz y calor, aún es invierno y no quiere asomarse. Otro día llega el viento y quiere que deje entrar por la ventana el aire fresquito, y la semilla aún no quiere salir. Más tarde, es la lluvia la que insiste llamando a su puerta, pero como aún no ha llegado la primavera tampoco sale. Y por fin, cuando llega la primavera y los tres amigos llaman a la puerta de la semilla, ésta estira sus raíces, alarga su tallo y asoma para dar la bienvenida al sol, al aire y al agua, y mostrarnos la hermosa flor en la que se convierte.

Con este cuento hemos hablado del crecimiento de las plantas, de sus distintas partes y de los cuidados que necesitan. Como lo hemos aprendido muy bien, nos hemos convertidos en jardineros, dispuestos a plantar y cuidar nuestras semillas.

Así que la semana pasada, en nuestra mesa de las Estaciones, aparecieron objetos nuevos y estuvimos viendo qué eran y para qué servían.

Nos encantó la propuesta de convertirnos en jardineros, y aprendimos lo que eran los semilleros (algo así como las "cunas" de las semillas), la tierra, la regadera... y la variedad de semillas que hay.

Salimos al patio y cada niño y niña plantó sus semillas...

Y además las regamos y las pusimos un ratito al sol.

Ya ha pasado una semana desde que las plantamos, las seguimos cuidando como en el cuento, cerca de la ventana para que entre aire y luz, las regamos cuando la tierra está seca... pero aún no han crecido las semillas, debe ser que como hasta hoy no ha llegado la Primavera no han querido salir.

Hemos sembrado lechugas y tomates pequeñitos, y han debido enterarse un par de caracoles que pronto tendríamos un pequeño huerto, que se han venido a clase para que los observemos y los cuidemos.

La verdad es que salen poco, y yo les digo a los niños que tienen que mirar con cuidado, que si los mueven mucho se marean y no quieren salir, así que después de cuidarlos un tiempo, les he propuesto a los niños y niñas dejarlos libres en el patio.

Y para animar a las plantitas a crecer, hoy hemos contado otra vez el cuento de "la semilla dormilona", pero esta vez en forma de teatro, y han sido algunos niños y niñas de la clase los que lo han narrado a sus compañeros...

¡Por fin ha llegado la Primavera!

Ahora tendremos que decorar la clase para dar la bienvenida a la nueva Estación, así que ya nos hemos puesto manos a la obra...

EN EL TALLER DE MURILLO

Con motivo de la celebración del Día de Andalucía nos habíamos planteado conocer algunos paisajes, monumentos, tradiciones y otros aspectos más de Andalucía, entre ellos algún personaje importante.
Como este año se está conmemorando la figura del pintor sevillano Bartolomé Esteban Murillo, con motivo de la celebración del IV Centenario de su nacimiento, decidimos que sería muy interesante que nuestros niños y niñas conocieran a este pintor y disfrutaran del Arte de la pintura.

Así que después de unos días de descanso, cuando llegamos a clase nos encontramos con un curioso personaje. Un gracioso angelito que estaba un poco perdido en Sevilla y nos contó una divertida historia.

Dando vueltas y vueltas se coló por una ventana, nada más y nada menos que en el Museo de Bellas Artes de Sevilla. Zacarías, que así se llama nuestro amiguito, se puso muy contento cuando vio que allí había muchos angelitos como él pintados en los cuadros, también quiso jugar con los niños que se encontraban en los lienzos, pero se montó un buen revuelo...

Después de sus aventuras y trastadas, al final se quedó allí a vivir, y ha sido Zacarías el que nos ha hablado de Murillo, y se ha convertido en nuestro guía en la "visita" virtual que hemos hecho por algunas obras de este pintor, obras que se encuentran en Sevilla y otras que por su temática eran más cercanas al mundo infantil.

Todo lo que nos enseñó Zacarías, incluso como se escribía el apellido del pintor, lo pusimos en un expositor para poder observar bien su obra y pintar como él.

Decidimos trabajar uno de sus cuadros en el que el juego de luces y sombras es muy significativo ( la luz entra en la habitación por la ventana ), y donde además, el personaje es un niño. Hablamos del  cuadro conocido popularmente como el niño de las pulgas.

Utilizamos varias técnicas pictóricas, pero como teníamos que pintar igual a como lo había hecho Murillo, buscamos un "caballete", pinceles, una improvisada paleta y pinturas, y nos convertimos en "aprendices" de Murillo pintando en su taller.

¡¡¡Con todas nuestras obras montamos una bonita exposición!!!

Y después de unos días de aprendizaje y con unas nociones básicas de pintura, dejamos paso a nuestra creatividad e imaginación para crear obras pictóricas al gusto de nuestros niños y niñas. 

¡¡¡Creo que la técnica de luces y sombras todavía no la dominan, pero en mezclar las pinturas en la paleta son todos unos artistas!!!

Y este es el resultado final de nuestras obras, en un lado las pinturas con técnica más academicista, y en el otro lado las más creativas.

Nos hemos divertido mucho en el Taller de Murillo, y dejaremos todos los materiales en un rinconcito de la clase para seguir pintando y explorando nuevas formas artísticas.

Si tenéis ocasión, en Sevilla podéis visitar alguna exposición sobre Murillo, y de paso acercaros al Museo de Bellas Artes por si os encontráis con Zacarías y podéis ver las pinturas de Murillo que hay allí. 

Existe en el Museo un recorrido especial para los niños de Infantil (os dejo el enlace)

Museo de los Niños

¡ADIÓS ORUGUITA!

Ya hace algún tiempo que nuestra amiga la pequeña oruga glotona se presentó en la clase. Con ella hemos aprendido mucho sobre las frutas y los vegetales.

Y como la oruga tenía que comer mucho para poder crecer, tuvimos que darle de comer en muchas ocasiones.

La seño nos ponía los platos y teníamos que contar cuantas cosas se comía la oruguita y relacionarla con su número.

Y otras veces lo ponía más difícil. Nos ponía los platos, teníamos que contar las frutas, relacionarlas con su número y poner otro plato con la misma cantidad. 

¡¡¡A veces con un poquito de ayuda, y muchas ocasiones sin ayuda, y lo conseguimos hacer!!!

 También nos ha enseñado la oruga muchos juegos sobre las formas y los colores.

Hemos jugado con las formas del círculo, cuadrado y triángulo, las hemos clasificado y estamos aprendiendo sus nombres, aunque todavía alguno nos cuesta recordarlo. Pero otra vez la seño ha complicado un poco el juego, nos enseñaba las tarjetas de atributos y teníamos que buscar la pieza, atendiendo a la forma, el color y el tamaño.

¡¡¡Aunque en alguna ocasión se dudaba un poco, lo hemos hecho muy bien!!!

Y como sólo teníamos piezas de color rojo, amarillo y azul, se presentó el Monstruo de color VERDE y le buscamos muchas cosas de ese color, y aprendimos que había varias tonalidades en los colores.

 Resultó muy divertido buscar por la clase cosas verdes, pero alguno aprovechó para ponerse un poco más inquieto de lo normal, así que nuestro Monstruo verde nos habló de la CALMA!!!

Y de este modo terminó la semana y tuvimos que despedir a nuestra oruguita, pero eso sí, cada niño y niña se llevó una oruga a su casa de recuerdo, y bien provista de alimento, así que observarla bien por si hace un capullo y se transforma en...

¡Se me olvidaba contar que nosotros también nos hemos convertido en otra cosa!

¡Hemos montado un taller de pintura!

¡Mejor lo mostramos en la próxima entrada!