Con tanto viento en la clase, el lunes de la semana pasada nos encontramos con un montón de hojas en la gran bandeja.
Se trata de una provocación sensorial en la que los peques comienzan a interactuar de forma libre, y yo me dedicaba a observar que hacían los peques mientras tocaban las hojas. Algunos peques cogían las hojas por el tallito (pecíolo) con mucho cuidado, y otros directamente las estrujaban entre las manos.
Después de un ratito empecé a conversar con ellos sobre las formas de las hojas y sus colores, recogiendo sus ideas, qué sabían ellos y qué me contaban.
También estuvimos viendo el erizo que envuelve a la castaña con mucho cuidado, ¡qué pincha!
Elegimos algunos colores que habíamos observado en las hojas de otoño y nos pusimos a colorear cada uno nuestra hoja.
Y mientras tanto, llegaron las "apisonadoras".
Así que decidimos utilizar todos los trocitos de hojas que quedaron, y algunas hojas que cogimos en el patio, para decorar nuestras hojas.
¡Y así de chulas nos quedaron!
Trabajamos mucha motricidad fina y los sentidos de la vista, el tacto y el oído, ya que cuando las tocas, suena como si estuvieras pisando la hojarasca!!!
El martes estuvimos trabajando los colores, y es que nos dimos cuenta que no tenemos pintura naranja, así que pensamos como podíamos conseguirla...
¿Y si mezclamos el rojo y el amarillo?
Un poco de rojo en una mano.
Un poco de amarillo en la otra mano.
Frotamos las manos.
¡Sale el color naranja!
¡Y ahora todos a mezclar!
Tenemos que esperar a que todos tengamos los dos colores en la cartulina.
Preparados, listos...
¡YA!
Después del recreo vino la mamá de Enzo a contarnos un cuento.
Enzo ha cumplido 3 años, y después del cuento lo celebramos.
¡Muchas Felicidades!
En los días siguientes estuvimos jugando con los colores.
Como ya somos "especialistas" en colores jugamos con las manos mágicas. La seño dice colores, y por parejas salimos para ver quién es el más rápido!!!
Y decoramos las frutas de otoño con papelitos rojos y amarillos.
Un día decoramos la manzana y utilizamos las tijeras para recortar los papelitos.
Otro día rasgamos con nuestras manos los papelitos amarillos.
Estuvimos trabajando mucha motricidad fina, y por supuesto que necesitaron ayuda, pero estuvieron muy motivados y ejercitaron los deditos, además de manipular el pegamento.
Y para terminar la semana, estuvimos jugando con hojas de otoño plastificadas, para que duren más, y la Caja de luz.
Todos participaron formando caras como las del poema Mi cara redondita, pero con las hojas y cambiando los colores de la Caja de luz.
¡Las caras eran muy graciosas!
¡Montamos un rincón en el que algunos peques que querían, estuvieron un rato manipulando libremente!
Y dibujamos nuestra cara REDONDITA, así que utilizamos un plato como molde, y con mucha atención y control del rotulador nos salía una cara muy redontita!!!
Pronto os enseñamos nuestros retratos, pero lo que ya hemos terminado es...
¡Nuestro Árbol con las hojas de Otoño!
Y tuvimos nuestra sesión de psicomotricidad jugando con "los saquitos de peso", pero a la seño se le olvidó sacar fotos!!!
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